En una muestra más de la anarquía que promueve el Nuevo Grupo Sindical (NGS), comerciantes ambulantes del Centro Histórico de Cuernavaca irrumpieron la sesión de Cabildo del Ayuntamiento capitalino, sin un motivo sólido.
El líder de esta organización, Ben Hur Hernández Bringas, ordenó a sus agremiados sabotear la sesión para presionar a las autoridades municipales, con el fin de que permitan la instalación de más personas en el comercio informal.
Un reducido grupo de ambulantes, con sus hijos menores de edad, se introdujo al salón de cabildos exigiendo una audiencia, por lo que se declaró un receso para atender una comisión.
Sin embargo, al cuestionar los regidores a los manifestantes sobre cuál era el tema a tratar, estos dijeron desconocer pero que “su líder les iba a comentar una vez que fuera interrumpida la sesión”.
Una de las manifestantes dijo que esperaría la llamada para recibir indicaciones de su líder.
Los regidores propusieron que una comisión fuera atendida por el secretario de turismo y desarrollo económico, Juan Pons Díaz de León, pero los manifestantes recibieron la orden de salirse de la sede del gobierno municipal y bloquear la avenida Morelos esquina con Motolinía.
